Sabeis ese momento, cuando alargas el brazo y no puedes alargarlo mas? y solo te queda esperar que otra persona alargue el suyo para cojerla de la mano? Pues asi estoy yo, dicho de una manera un tanto figurada.
De golpe y porrazo todo se ha torcido, y aun no alcanzo a comprender el porqué. Es decir, se la causa, pero no porque se ha producido. Siempre digo que hay que hacer todo lo posible por solucionar las cosas, y lo sigo pensando. Pero llega un punto que no puedes dar o hacer mas, que lo unico que te queda es luchar por lo que amas, aunque sea a base de paciencia, de esperar, de una espera que me hiere como estacas clavadas en el pecho. Y aun asi, aun viendolo todo gris, aun sin poder hacer otra cosa que esperar aqui sigo, luchando, por momentos estupendos, por recuerdos imborrables. Luchando por un sentimiento que sigue ardiendo con fuerza, luchando como un loco que se niega a rendirse. Aunque reconozco que en esta batalla no dependo solo de mi, y me empieza a costar mantenerme en pie. Pero soy consciente de lo que de verdad quiero, y de que sería capaz de luchar hasta cojo y con una mano.
Escribo esto, simplemente para aliviar un poco este peso que llevo estos dias, pues tengo fe en que los nubarrones pasarán, estoy practicamente convencido...pero como he dicho antes, yo solo puedo mirar al cielo, y seguir luchando, mientras espero que bufe el viento y ver hacia donde.
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